Por Luis M. Restituyo Capellán
La renuncia del Alcalde y la Vicealcaldesa del municipio de La Vega, constituye una buena oportunidad para que se pueda incluir dentro de la reforma constitucional, mecanismos verdaderamente democráticos y representativos de la voluntad popular, para atender este tipo de situaciones. Se antoja necesario la inclusión de un apartado en la constitución que permita la celebración de una elección especial bien sea general con la participación de todos los partidos políticos o unas primarias especiales dentro del partido que encabezó la boleta municipal en esa demarcación.
Lo primero sería la opción que en mi opinión representa la más atractiva y que mayor consenso generaría en el sistema de partidos de la República Dominicana pues permitiría que las vacantes sean resueltas apelando de forma directa a la voluntad de los munícipes. La segunda considero que es la más injusta con el partido político que llevó al Alcalde renunciante, pues después de todo, los munícipes votaron no solo por ese Alcalde, sino que también votó porque esa organización política que lo postuló dure 4 años ejecutando la propuesta municipal que presentaron.
Constituye una obvia debilidad de nuestro sistema, que la gestión municipal pase a ser encabezada por una persona que no recibió el respaldo de los munícipes, aunque el marco legal actual (Ley 176-07) establezca que la posición sea ocupada por el secretario general, o por quien sea designado por el concejo municipal. Y en medio de un proceso de discusión para modificar nuestra constitución, no hay mejor oportunidad para abordar temas que puedan fortalecer nuestra democracia y construir una mejor República Dominicana.
El autor es egresado de la carrera de Ciencias Políticas de la Universidad Interamericana de Puerto Rico y cursa estudios de Maestría en Relaciones Internacionales y Estudios Globales en la Universidad de Northeastern.
